¿Quién soy?

Mickael Vavrinec es mi alter-ego escritor, una rata habitante de la cloaca galaica que, como cualquiera otra rata, no tiene mejor cosa que hacer que devorar excrementos. Así que, en busca de actividades menos asquerosas y más productivas, se dedica a escribir historias.

Si hablamos del hombre que se esconde bajo la máscara de Mickael, te contaré mi querid@ lector/a, que apenas es un joven universitario que tiene entre sus aficiones la música rap, el baloncesto, los videojuegos, el anime, el manga, el cine y la literatura, y a quién le encanta el chocolate.

Si hablamos de Mickael Vavrinec, entonces tenemos historia para largo, pues a pesar de que la máscara de Mickael Vavrinec es de reciente creación,  su actividad manejando los hilos de este títere  se remonta a mi más tierna infancia. Desde pequeñito tuvo una ferviente admiración por la poesía, razón por la cuál sus primeros escritos infantiles fueron poesías, de hecho hoy en día aún compone poesías, sobretodo en lengua gallega. Quizás puedas encontrar algunas de ellas entre los recovecos de este blog.

Sigamos hablando de Mickael, en este caso, toquemos la narrativa. Vavrinec ha escrito durante la secundaria algunos relatos cortos en gallego para concursos del instituto, nuevamente puede que algún día encuentres alguno de ellos por aquí. Fue en esta etapa, en la secundaria, cuando con tan sólo 14 años, leyó el libro que más le ha marcado como lector y escritor, «Memorias de Idhún: La resistencia». Tras leer este libro sintió el impulso de escribir una novela de fantasia, seguramente llena de errores gramaticales, ortográficos y narrativos, pero echa con una gran ilusión, que se perdería posteriormente en un formateo.

Años después, en su mente empezó a formarse la idea de escribir una historia larga, mas la dificultad del curso le impidió formalizar la idea por escrito, obligándolo a únicamente poder trabajar en el guión, reeestructurándolo varias veces. Llegado el verano, libre de todo tipo de barreras, finalmente se dedicó a escribir la historia que ahora mismo se publica en este blog y en la revista online «¡No lo leas!»: «El ocaso del alba»

Creo que después de estos párrafos queda claro qué es «Crónicas de una rata de cloaca»:  es simplemente un pequeño espacio en donde poder compartir todo trabajo literario que realize con cualquier persona que esté interesada en ello.

Por último, he de añadir aquí mis agradecimientos (esta lista seguramente esté en constante modificación):

– A mi padre, por inculcarme desde pequeño el amor por la literatura, corregirme mis relatos y apoyarme en todo lo que hago.

– A mi madre y a mi hermana, por enseñarme lo que es la constancia y la perseverancia, a levantarme cada vez que me caigo y a no rendirme nunca.

– A Javier Escámez Álvarez «Habimaru», el roedor supersaiyan, por ser el primero en interesarse en mis historias, brindarme su ayuda, darme sus críticas y animarme a entrar en la revista online de la que hoy soy redactor: «¡No lo leas!»

– A Missis Music, mi amable ilustradora, que ha decidido cargar ella sola con todo el peso del grafix y el arte plástico del blog, de la revista (en cuánto a lo que a mi me concierne) y de las historias que yo escriba.

– A mi querido Kohai, a quién he introducido, primero en el maravilloso mundo del videojuego Kingdom Hearts, y después en el de los animes. Ahora también te introduzco en mi historia y sé que cuento con tu apoyo y tu opinión como lector.

Espero que disfruten de su estancia.

Saludos desde la cloaca.

Atentamente: Mickael Vavrinec